Excursión en familia por los alrededores de Albarracín
Excursión en familia por los alrededores de Albarracín

Excursión en familia por los alrededores de Albarracín

El 28 de junio de 2012 vivimos una jornada mágica con una excursión en familia explorando los alrededores de Albarracín. Juani, nuestras hijas Blanca de 11 años y Carmen con tan solo 3 añitos y yo nos aventuramos en coche y a pie por esta increíble región, combinando historia, naturaleza y momentos de diversión.

Excursión en familia por Los Pinares del Rodeno

Nuestra primera parada fue en Los Pinares del Rodeno, un entorno natural impresionante donde se encuentran las famosas pinturas rupestres. Caminamos por un sendero bien señalizado hasta llegar a los abrigos rocosos que albergan estas fascinantes muestras de arte prehistórico. Blanca estaba entusiasmada por reconocer figuras humanas y animales que había estudiado en el colegio, mientras Carmen, sentada cómodamente en la silla que llevaba a mi espalda, disfrutaba del paseo con curiosidad.

Después nos dirigimos a la Laguna de Bezas, un rincón tranquilo rodeado de vegetación que parecía sacado de un cuadro. El reflejo del cielo sobre sus aguas y el canto de los pájaros crearon un ambiente de paz perfecto para hacer una pausa. Blanca aprovechó para explorar los alrededores y Carmen, como siempre, nos deleitó con su energía al intentar perseguir mariposas.

Al acercarse la hora del almuerzo, encontramos una zona de descanso con un parque infantil que fue todo un acierto. Blanca y Carmen no tardaron en subirse a los columpios y toboganes mientras nosotros, Juani y yo, disfrutábamos de un momento de tranquilidad. Verlas reír y disfrutar al aire libre hizo que ese pequeño descanso se sintiera como uno de los momentos más especiales del día.

Por la tarde, nos dirigimos a la cascada del Molino de San Pedro, el broche de oro de nuestra excursión en familia. Esta maravilla natural nos dejó sin palabras: el agua cae con fuerza desde lo alto, formando una piscina natural rodeada de vegetación. Blanca no paraba de soñar con volver en verano para bañarse, mientras Carmen observaba el agua hipnotizada desde la seguridad de mis brazos. Caminamos por los alrededores y aprovechamos para tomar algunas fotos que, con el tiempo, se han convertido en preciados recuerdos de esta aventura.

Fue un día completo y lleno de momentos inolvidables. Si tienes la oportunidad de visitar los alrededores de Albarracín, no lo dudes: este lugar tiene algo especial que se queda contigo, haciéndolo especial para realizar una excursión en familia. Nosotros, desde luego, esperamos regresar algún día para seguir explorando su magia.